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Por Leer es una de las actividades más enriquecedoras y entretenidas que puede realizar una persona. Te abre el mundo de posibilidades y eleva tus niveles de pensamiento. Aunque empezar con un solo libro puede acabar formando una biblioteca casera completa. Sin embargo, con múltiples libros acumulados a lo largo de los años, organizarlos puede convertirse en todo un reto.
Para ayudarte, aquí tienes algunos consejos útiles para organizar una biblioteca casera que te facilitarán encontrar, leer y disfrutar de tus libros.
Empieza con un plan
El primer paso para organizar una biblioteca casera debe empezar siempre con un plan. No debes intentar organizar tu biblioteca sin tener una idea clara de cómo quieres que sean tus libros, qué libros vas a conservar y cuáles tendrás que sustituir. Un plan de biblioteca implicará decidir cuál es la mejor disposición de tus estanterías, si se aplicará el orden alfabético, por materias o por nombres de autores.
Ordena tus libros
Una vez que tengas un plan, es hora de ordenar tus libros. Ordena tus libros según tus categorías para que cada libro tenga su sitio en la estantería. Puedes ordenar tus libros de varias formas, por ejemplo, por categorías, como ficción, no ficción, biografía y poesía. Ordena tus libros por orden alfabético, apellido del autor, clasificación de la Biblioteca del Congreso o código de colores.
Elimina los libros que no quieras
Al clasificar, recuerda descartar los libros que ya no te interesen o que ya no te atraigan. Los que no estén en buen estado, ediciones obsoletas o duplicados que no pienses regalar a nadie, deshazte de ellos.
Invierte en estanterías
En el mercado existen muchos tipos diferentes de estanterías, según nuestras necesidades y preferencias. Las estanterías pueden ser abiertas o cerradas, según tus preferencias personales. Las estanterías abiertas facilitan el acceso, mientras que las cerradas pueden proteger tus libros del polvo y la luz del sol. Invierte en sujeta libros, soportes y organizadores para evitar que los libros se caigan y las páginas se doblen.
Organiza tu estantería
Ahora que hemos clasificado los libros, es hora de pasar a la organización propiamente dicha de la biblioteca. Coloca los libros en el orden en que los has clasificado; si lo haces alfabéticamente, asegúrate de que la primera palabra del alfabeto coincide con la estantería. Añade pequeños recuerdos, marcapáginas o pequeños adornos para dar un toque personal y hacer que tu biblioteca parezca más acogedora.
Utiliza etiquetas
Etiqueta cada categoría, estantería o sección. Esto te ayudará a ti y a los demás a encontrar los libros con facilidad, ahorrando tiempo y muchas frustraciones. Etiquetar las estanterías te ayudará a seguir el ritmo de la organización de la biblioteca y reducirá el esfuerzo que supone escudriñar todos los libros para localizar lo que buscas.
Gestiona las colecciones
Una vez establecido tu sistema de organización, es conveniente tener un plan para gestionar tu nueva colección de libros. Si estás coleccionando libros de varios géneros, es una buena idea llevar un registro de lo que tienes y de los libros que quieres conseguir. Utilizar un registro o una hoja de Google para gestionar tu colección evitará duplicidades y duplicados.
Mantenimiento regular
Por último, mantén tus libros ordenados dándoles un cuidado regular. Quitar el polvo, pasar la aspiradora y limpiar las estanterías con un limpiador suave los mantendrá frescos y limpios. Si tienes una biblioteca de libros raros y caros, siempre será bueno mantener la temperatura y el nivel de humedad medios para evitar que se estropeen. El mantenimiento constante de tus libros y biblioteca los mantendrá en buen estado y hará que tu colección dure muchos años.
El mantenimiento constante de tus libros y biblioteca los mantendrá en buen estado.
Una experiencia única
Organizar una biblioteca puede ser una experiencia divertida y llena de creatividad. Con sencillos esfuerzos y un poco de tiempo, es fácil convertir hasta el más desordenado de los espacios en un oasis organizado de libros. Estos consejos deberían orientarte en la dirección correcta y hacer que organizar tu propia biblioteca sea una experiencia divertida y gratificante.
