En cuanto se notan los primeros días de calor es común pensar en la talla. Esto tiene relación con que las prendas más sueltas que dejan ver la figura son las más adecuadas para pasar los momentos más calurosos del año.
Sin embargo, lo fundamental en estos casos es no desesperar y tomar con calma la situación. Si bien el verano llegó, hay que ser realistas y objetivos para poder perder peso de manera saludable.
En este sentido, la época estival es ideal para hacer ejercicio al aire libre y en horas matutinas que es cuando mayor grasa se puede perder.
Además, el verano convoca a tener una dieta más saludable. Si bien es cierto que cuando las noches son más agradables, la tendencia es comer fuera de casa, se puede comer saludable porque los alimentos de estación son más livianos y hoy en día en los restaurantes hay muchas opciones sin necesidad de quedarse con hambre, como con una simple ensalada de verdes.
Una meta saludable es proponer rebajar un kilo a la semana aproximadamente, a su vez teniendo en cuenta la situación de cada uno. Dormir adecuadamente para encontrar el descenso es primordial, ya que el sueño permite producir la cantidad de cortisol que el organismo necesita para funcionar en las horas diurnas.
Asimismo, evitar llegar a las comidas con hambre. Esta situación lleva a elegir de manera inadecuada a los alimentos. Por lo general cuando se genera ansiedad se eligen panificados, bebidas calóricas, alimentos ultraprocesados o pre congelados, que si bien se cocinan con mayor facilidad y sacian más, también colaboran con el aumento de peso.
Otro punto importante a la hora de rebajar es tener en cuenta a todas las comidas, no saltearlas. Estos ayunos extensos hacen que el organismo produzca mayor insulina, lo cual se traduce en una necesidad de consumir azúcares.
En definitiva para llegar al verano con la figura deseada, no es posible pensar en este momento del año como algo especial y único. Lo más saludable es mantener hábitos y rutinas a lo largo del año y establecer metas realizables.
Cabe aclarar, que ante cualquier necesidad de bajar de peso lo más recomendable es pedir ayuda profesional y consultar al médico para hacer controles anuales de rutina.